Apuntes de Destaque Internacional.  Domingo 28 de junio de 2015. Responsable: Javier González. E-mail: destaque2016 @ gmail.com (opiniones, pedidos de suscripción y remoción, sugerencias, etc.)

Francisco, consumismo, miserabilismo y Boff

1.

En su reciente encíclica Laudato Si, el pontífice Francisco, al igual que en su encíclica Evangelii Gaudium y en declaraciones a medios de comunicación, contribuye a arrinconar el derecho de propiedad privada, que no es objeto de ningún incentivo o elogio y sí de desconfianza (No. 93). Parece ser ésta una actitud diametralmente diferente a la que  adoptaron durante décadas sus predecesores que defendían la doctrina tradicional de la Iglesia. En efecto, en la encíclica no se realza siquiera una vez ese derecho, con su función personal y familiar, primordial y legítima, que posee el respaldo nada menos que de dos mandamientos de la ley de Dios: “no robar” y “no codiciar los bienes ajenos”. El derecho de propiedad va quedando debilitado y anémico ante la insistencia papal en una “función social” que parece adquirir una dimensión hipertrofiada y que, de esa manera, puede llegar a asfixiar el órgano individual del cual es una función.

2.

El pontífice llega al punto de anatematizar el actual sistema internacional de propiedad como “estructuralmente perverso” (No. 52), al tiempo que embiste contra el “consumismo obsesivo” (No. 203) y “sin ética” (No. 209). Y coloca como uno de los ejemplos a ser seguidos el de ciertas “comunidades de pequeños productores” que estarían desarrollando un saludable “modelo de vida” y de “convivencia no consumista” (No. 112). Lamentablemente el pontífice no identifica esas “comunidades”, en qué parte del mundo se localizan y cuáles serían sus características propias. En efecto, el análisis de las referidas “comunidades”, colocadas como ejemplo por el pontífice, serviría para conocer mejor su pensamiento, sus metas y sus objetivos. 

3.

De cualquier manera, delante de lo anterior, no parece en vano que el tirano Raúl Castro haya declarado a la prensa, después de ser recibido por Francisco en Roma, y de estrechar las manos del Pontífice con sus ensangrentadas manos: “Como ya les he dicho a los dirigentes cubanos, yo me leo todos los discursos del Papa y sobre todo los comentarios que él hace. Y si el Papa sigue hablando así, comenzaré a rezar y volveré a la Iglesia. Y no lo digo en broma” (Página 12, Buenos Aires, 11-05-2015). En ese sentido, para no dejar dudas sobre la continuidad de su real pensamiento, inmediatamente después de despedirse de Francisco el tirano reafirmó su condición de “comunista y del Partido Comunista de Cuba” (Radio Habana Cuba,10-05-2015). Entonces, ¿qué tipo de “conversión” sería esa de un comunista que anuncia que podrá volver al seno de la Iglesia, pero que continúa siendo comunista? Todo indica que, en ese contexto, podría tratarse de una sui generis “conversión” al comuno-progresismo católico y no a la verdadera fe católica.

4.

En la encíclica Laudato Si, el pontífice Francisco señala que en el fondo está levantando una bandera de “creyentes y no creyentes” (No. 93). Con ello, parece interpretar el discurso de las izquierdas latinoamericanas y de la teología de la liberación, según las cuales prácticamente toda la culpa de la miseria en el mundo tendría su causa en el régimen actual basado en la propiedad privada, la libre iniciativa y la subsidiariedad del Estado, estigmatizando a la propiedad como esencialmente contraria a los intereses populares, generadora de desigualdades injustas y mero instrumento de los capitalistas para explotar a las mayorías oprimidas.

5.

No obstante, en América latina los porfiados hechos muestran lo contrario. Los países que han mejorado el nivel de vida de la población han sido aquellos cuyos gobiernos incentivaron precisamente  la propiedad privada, la libre iniciativa y la subsidiariedad del Estado. En sentido diametralmente opuesto, los gobiernos socialistas que asfixiaron y continúan asfixiando la propiedad son los mayores productores de miseria y de agresión al medio ambiente. Venezuela es un caso típico de régimen socialista que, además de producir represión y aplastamiento de libertades, se ha transformado en uno de los mayores generadores de miseria. Por su parte, el régimen comunista cubano mantiene a los habitantes de la isla-cárcel en la pobreza más humillante por causa del propio sistema que aplasta a la propiedad privada, y no por causa del alegado embargo norteamericano, un mero pretexto del régimen y de sus protectores internacionales, incluyendo al presidente Obama y al propio Francisco (cf. Armando Valladares, “Eje Obama-Francisco: Cuba, prestidigitación y confusión”, 04-01-2015 http://www.cubdest.org/1506/c1501franciscoav.htm ). 

6.

Es importante mencionar que, en el caso de Cuba, teólogos de la liberación desde hace décadas han hecho las mayores apologías del miserabilismo comunista, como una salida supuestamente cristiana ante el consumismo occidental.  Hace años, el teólogo de la liberación brasileño Fray Clodovis Boff viajó a Cuba con su hermano Leonardo Boff y con Fray Betto. En su crónica del viaje a la isla-cárcel, titulada “Carta teológica sobre Cuba”, Fray Boff afirmó haber tenido “la impresión general” de visitar “una inmensa comunidad de religiosos, donde todos tienen lo necesario y no hay nada de superfluo o lujoso”.  El religioso liberacionista añadió en el mismo sentido: “Me gustó esa vida reducida a lo esencial. Para mí, la austeridad no es un expediente económico para salir de las crisis, pero sí un ideal de vida social”. Fray Betto,  confidente de Fidel Castro, añadió en el mismo sentido miserabilista: “Para vivir en Cuba hay que tener vocación, saber compartirlo todo y pensar en términos de nosotros y no del yo, de su egoísmo”. Y el teólogo de la liberación nicaragüense Ernesto Cardenal, que acaba de ser rehabilitado por Francisco, llegó a afirmar que “en Cuba se desarrolla la primera sociedad verdaderamente cristiana de América latina”. El tema del “miserabilismo” cubano, al mismo tiempo como una doctrina, como una meta común comuno-católica y como un ejemplo de modelo social anticonsumista, defendido o justificado por importantes teólogos de la liberación y por el propio Episcopado cubano, fue abordado en el libro “Dos décadas de progresivo acercamiento comuno-católico en la isla-presidio del Caribe ( Cubanos Desterrados, Miami – New York, junio de 1990; Introducción; Parte III, Capítulo 8; y un importante Apéndice: “Una sociedad ‘miserabilista’ atrofia las potencias del alma humana, fomenta la connaturalidad con lo horrendo y atenta contra la gloria de Dios”; este libro se puede bajar gratuitamente en el link http://www.cubdest.org/libros/hastacuando1990.pdf ).

7.

En ese contexto, cobran importancia las detalladas revelaciones, con nombres y apellidos, que acaba de hacer el teólogo comuno-ecologista Leonardo Boff sobre las consultas que Francisco le fue haciendo sobre asuntos ecológicos, y los recados que el pontífice le fue enviando a través de comunes amigos, como el embajador argentino ante la Santa Sede. En esas recientes declaraciones, Boff da detalles de llamadas de agradecimiento hechas a esos comunes amigos por colaboradores de Francisco, por su ayuda en la preparación de la encíclica. Leonardo Boff acaba de hacer estas revelaciones al periódico Jornal do Brasil (edición electrónica, 21-06-2015 http://www.jb.com.br/pais/noticias/2015/06/21/enciclica-do-papa-vai-reforcar-visao-mais-integral-de-ecologia-diz-leonardo-boff/ ) y hasta el momento no fueron desmentidas.

8.

Delante de todo lo anterior, el rumbo del pontificado de Francisco en asuntos sociales y políticos va tomando un cariz cada vez más preocupante, junto con la misteriosa continuidad del apoyo al intrínsecamente perverso régimen comunista cubano que continúan dando, desde hace décadas, eclesiásticos latinoamericanos y cubanos, y la propia secretaría de Estado del Vaticano. Es del caso de preguntar si con el resurgimiento de la teología de la liberación no estaremos siendo empujados en la dirección deseada por monseñor Helder Câmara, el arzobispo “rojo” de Olinda y Recife, manifestada en sus conversaciones con el teórico comunista Roger Garaudy en 1975: “Para nosotros, los cristianos, el próximo paso a dar es que se proclame públicamente que no es el socialismo, y sí el capitalismo, que es ‘intrínsecamente perverso’, y que el socialismo no es condenable sino en sus perversiones. Y para Ud., Roger, el próximo paso a dar es mostrar que la revolución no está ligada por un vínculo esencial, sino solamente histórico, con el materialismo filosófico y el ateísmo, y que ella es, por el contrario, consubstancial con el cristianismo” (“Parole d’Homme”, Editorial Robert Laffont, Paris, 1975, pág. 118; citado por Plinio Corrêa de Oliveira en el libro “La Iglesia ante la amenaza de la embestida comunista – Un llamado a los obispos silenciosos”, São Paulo, 1976; el libro puede bajarse gratuitamente en el link http://www.pliniocorreadeoliveira.info/livros/1976%20-%20Escalada.pdf ).

Mientras se acercan los trascendentales viajes papales a tres países de América del Sur, a Cuba y a Estados Unidos, es importante levantar respetuosamente estos temas, por más delicados que sean, como una cuestión de conciencia y de supervivencia.

9.

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10.

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