Destaque Internacional - Informes de Coyuntura -
Año VI - No. 142 - Responsable: Javier González, Buenos Aires / Madrid - Julio 6, 2004.-Venezuela: experimento "castro-chavista" rumbo al caos
Estrategias para desorientar, desarticular, dividir y desmoralizar a aquellos venezolanos dispuestos a resistir a la izquierdización de Venezuela
Venezuela "se está cubanizando", quien "da órdenes a Chávez es Castro o vienen directamente de Cuba", denunció hace pocos días el cardenal venezolano Rosalio Castillo Lara, de 83 años, en lúcidas declaraciones al diario "La Stampa", de Italia, que no tuvieron la repercusión internacional que merecían.
El intervencionismo económico socializante, la asfixia de la iniciativa privada, de la enseñanza religiosa y de las libertades individuales, las "purgas" en las Fuerzas Armadas y las embestidas para controlar el Poder Judicial, son antecedentes que confirman las aprensiones de esa alta personalidad.El propio gobierno venezolano reconoce que han ingresado al país 10 mil médicos y maestros cubanos, que, como se sabe, efectúan labores de adoctrinamiento y "re-educación" revolucionaria en medios populares de Caracas y de otras numerosas ciudades. También, según fuentes independientes, asesores de inteligencia cubanos actúan en puestos claves de la máquina estatal.
Sin embargo, a pesar de lo anterior, en el corto plazo la estrategia "castro-chavista" no parece tener como meta la implantación de un régimen comunista como el cubano, tal el grado de violencia al que debería recurrir -"paredón" incluido- lo que podría provocar una polarización nacional e internacional con efectos imprevisibles, probablemente indeseados para las izquierdas.
En realidad, la estrategia "castro-chavista" parece orientada a producir el caos, lo más generalizado posible en todos los órdenes de la vida venezolana, y lo más acentuado posible en la mente de cada habitante de esa estratégica nación sudamericana. Es esto lo que se desprende de la conducta del actual gobierno -en particular, de su mandatario- plagada de contradicciones y zig-zags que parecen ser intencionales y que cobran pleno sentido si se interpretan según una "lógica" implacable, la de la caotización.
De esa manera, se intenta desorientar, desarticular, dividir y desmoralizar a aquellos venezolanos dispuestos a resistir a la izquierdización de Venezuela, dentro del marco de las leyes de Dios y de los hombres.
Ese mismo caos inducido parece orientar también la acción de movimientos revolucionarios actuantes en América Latina, como los "indigenistas" bolivianos y ecuatorianos, los "sin tierra" brasileños, los "piqueteros" argentinos y los "senderistas" peruanos. Estos últimos acaban de reaparecer participando en manifestaciones callejeras en la ciudad de Ayacucho, a 500 Km al sur de Lima, habiendo incentivado la invasión de edificios del gobierno y de tribunales de Justicia, consiguiendo quemar los procesos de más de 10 mil terroristas y narcotraficantes.
El caos, no sólo como estrategia sino como meta revolucionaria, ha sido objeto de estudios de diversos especialistas. A esos estudios nos remitimos y los colocamos gratuitamente a disposición de los lectores interesados ("Las redes 'nómades' y su estrategia rumbo al caos", "Tácticas revolucionarias actuales: espontaneidad aparente y articulación 'invisible', rumbo a la anarquía", "Foro Social Mundial: las 'redes', sus metas y estrategias", "Foro Social Brasileño: la meta de 'desconstrucción' y 'reinvención' del hombre y la sociedad", etc.).
Es en ese delicado contexto nacional e internacional que el próximo 15 de agosto se efectuará en Venezuela un referéndum en el que los electores decidirán si el presidente Chávez continúa o no en el poder. Los venezolanos amantes de la libertad, actuando con lucidez y generosidad, buscando el bien común por encima de todo, tienen en sus corazones y en sus manos una oportunidad histórica para rechazar en las urnas el experimento "castro-chavista", contribuyendo a ahuyentar las brumas del caos, tanto en su país cuanto en el ámbito continental.
Nota: además de los referidos artículos sobre el caos, ofrecemos a nuestros lectores, por e-mail, también gratuitamente, la documentación compulsada para la redacción de este Editorial.