Dic. 9, 2000: Revista Guaracabuya, Internet. Dic. 14, 2000: Diario Las Américas, Miami
La verdad desnuda sobre los "logros"
de la revolución cubana
Por Gonzalo Guimaraens
"Los llamados ‘logros’ de la revolución" es uno de los estudios más contundentes para mostrar la verdad sobre los supuestos resultados favorables del comunismo cubano en materia de educación, salud pública, nutrición y empleo. Redactado en Cuba, en 1998, por los economistas Manuel Sánchez Herrero y Arnaldo Ramos Lauzurique circuló en la isla-cárcel como un auténtico "samizdat", con copias escritas a mano, eludiendo la censura del régimen. Uno de esos manuscritos pudo ser enviado al exterior en 1999.
Dicho estudio, poco conocido en el destierro, constituye un trabajo de investigación particularmente original y laborioso pues sus autores supieron penetrar en la maraña de los índices económico-sociales del régimen y de los discursos del dictador Castro mostrando paso a paso, con la ayuda de numerosas tablas estadísticas, sus manipulaciones, contradicciones y maquillajes, dejando en evidencia que los mentados "logros" sociales no son sino rotundos fracasos. Los autores señalan que el "totalitarismo comunista", en su afán por resaltar esos "logros sociales" y presentar a la revolución cubana como un paradigma a ser imitado por los demás países subdesarrollados, "no ha vacilado en exponerle al pueblo un cuadro tétrico del pasado, aprovechando para ello el monopolio que tiene sobre los medios masivos de difusión". Y hacen notar que este mismo método ha sido aplicado "con cuanto invitado extranjero, periodista, escritor, religioso, etc." ha visitado Cuba en los últimos años.
Veamos uno de los tantos ejemplos de deformación constatados por los autores: la manipulación de la tasa de mortalidad infantil. El dictador Castro, en su informe al 1er. Congreso del Partido Comunista de Cuba (PCC) aseveraba que en 1958, un año antes de la revolución ésta "era mayor de 60" por cada mil nacidos. El Ministro de Economía, José Luis Rodríguez, en su libro "Estrategia del desarrollo económico en Cuba" (La Habana, 2a. ed., 1990), da una cifra similar. Sin embargo, el Anuario Estadístico de Cuba (Juceplan, 1974, p. 28) reconoce que dicha tasa en realidad era de 33,4 por mil nacidos; cifra ésta cercana a la de estudios fidedignos de organismos internacionales, que la señalan como una de las más bajas de América Latina a fines de la década del 50. Sánchez y Ramos Lauzurique hacen un análisis similar en relación a la manipulación de la tasa de mortalidad general, la cual ha sido usada también para las "campañas propagandísticas" del régimen.
Las estadísticas "se deforman deliberadamente, como se hace en los regímenes totalitarios donde cumplen fines publicitarios" y en este terreno "Cuba no es la excepción, sino la regla", añaden los autores. Pero notan al mismo tiempo, con fina ironía, que la censura comunista no es infalible y a veces se enreda en su propias piernas, como cuando se le escapan esas incómodas contradicciones entre los demagógicos discursos de sus líderes y lo que consta en los oficiales Anuarios Estadísticos de Cuba, disponibles "en cualquier biblioteca pública".
En lo relativo a la educación, "la dirección, los voceros y los apologistas del régimen han tratado de dar siempre la impresión de que en Cuba prácticamente no había escuelas ni estudiantes antes de 1959", comentan Sánchez y Ramos Lauzurique. Sobre las tasas de analfabetismo, el dictador Castro, durante el 1er. Congreso del PCC, afirmó que en 1953 el 23,6 % de los mayores de 10 años era analfabeto. Ya el informe presentado ante el 5o. Congreso del PCC casi duplicaba esa cifra, afirmando que antes de la revolución el 40% de la población cubana mayor de 10 años era analfabeta. En realidad, recuerdan Sánchez y Ramos Lauzurique, la tasa de analfabetismo en los mayores de 10 años era de un 16% en 1957, según la conceptuada Geografía de Cuba escrita por Aguayo, de la Torre y Marrero.
Abundan los ejemplos que también merecerían ser citados. Pero ellos desbordarían los límites de este artículo, que junto con un reconocimiento al esfuerzo intelectual y a la valentía de estos dos economistas cubanos pretende ser un incentivo para que el texto integral sea leído por muchos y difundido ampliamente a nivel internacional. En la Internet, los interesados pueden encontrarlo en http://www.cubdest.org/0012/cmitlogr.html
La importancia del tema para la causa de la libertad de Cuba es innegable: los supuestos "logros" sociales de la revolución comunista continúan siendo el principal instrumento publicitario del régimen para consumo externo y el pretexto alegado por sus aliados y protectores para, de una u otra manera, justificar sus crímenes.
Gonzalo Guimaraens es analista político, experto en asuntos cubanos.
E-mail: GGuimaraens@altavista.net